miércoles, 5 de abril de 2017

Querer te
Querer me
más
a mí

miércoles, 18 de enero de 2017

Daría una de mis alas
para poder volar.

domingo, 19 de octubre de 2014

Ese lugar

Inspira.
Inspira.
Inspira más hondo aún,
y cuando vayan a reventarte los pulmones,
entonces sí,
expira.
Expira.
Expira.
Deja que tus pulmones quieran salir detrás del aire.
Que salgan,
quizás a dar un paseo,
que se lleven tu corazón,
en busca de un lugar más cómodo,
un oasis en medio de la ciudad.
Ese lugar en el que respirar no apriete el pecho,
En el que el corazón no tenga miedo de estallar en mil pedazos.

Ese lugar.

Respira.

10/04/2014

Estambul

Estambul no echa de menos a nadie. Estambul echa de más.
Estambul quiere dormir pero nadie la deja, todos quieren estar con ella día y noche, sin tapujos, sin remedios. Y aunque Estambul quiere dormir, tiene todo por ofrecer, así que el sueño no va a llegar.

Estambul echa de más, y todos la echan de menos, en parte porque saben que les esperará despierta, deshaciendo el nuevo día, dando a los viajeros otra oportunidad.

30/08/2014

domingo, 4 de mayo de 2014

No estaba muerta...

... aunque tampoco estaba de parranda.

Me he perdido un poco.
Bueno, he estado buscándome.
Y, la verdad, no es que me haya encontrado; pero he puesto el modo "restablecer contraseña", a ver qué pasa.

viernes, 2 de noviembre de 2012

Toma forma sin darte cuenta. Un día despegas las pestañas y estás despertando bajo otras nubes. Recuerdas los viajes cargando trastos, el esfuerzo, las cervezas de por medio, el calor del verano; pero han pasado tantas cosas que quizás eres un poco distinta. Has aprendido a ver algunos hoyos.

Despegas las pestañas y te preguntas en qué momento tu vida cambió tanto, por qué aunque te quedan tan lejos casi todas las personas que más quieres sigues queriendo estar aquí.

Pisas en esta tierra que parece firme, que te deja construir unos cimientos que te llenan de dudas, ¿es esta la ciudad? ¿o sólo es otra ciudad de paso?
Cuando el tiempo apremia
y la duda acecha,
invertir en eficacia
se vuelve obligado.

Rasgando las agujas,
ensuciando los cristales
con escupitajos.

Dolidos los tiempos muertos,
dolientes los despiertos
que duermen en vano.