Hoy ha sido raro.
Vamos, en general ha sido un día muy bueno, pero al caer la tarde... mi ánimo se ha ido con el sol.
Ya me voy conociendo, llevaba demasiado tiempo sin tener en cuenta lo que los demás pensaran de mí, demasiado tiempo viendo el vaso medio lleno (a pesar de estar sólo a la mitad), demasiado tiempo con ganas de reírme hasta de mi sombra.
No es por algo en concreto, es una sensación desagradable que me invade y cubre todos mis pensamientos de un gris tan triste que todo lo que me rodea se marchita y me siento tan pequeña al lado de los otros que no me quedan ganas de ser fuerte.
A veces se me pasa cuando me levanto por la mañana y la luz del día inunda toda la habitación o cuando escucho esa canción que me lleva a un momento agradable, cuando la primera cara conocida me provoca una sonrisa o cuando el sabor del café es tan intenso que te despierta y te devuelve a la realidad.
A veces, simplemente, se me pasa, lo que no me gusta es que sea de esas otras veces que cuesta un poquito mas.
Y tú haces que sea más difícil.
Ya tengo internet!!!
Ah, otro examen menos, sólo quedan 3!
No hay comentarios:
Publicar un comentario