martes, 10 de noviembre de 2009

Me puse a buscar tu cara entre la gente

Hoy quería hablar contigo. Ha sido un día raro, de esos que empiezan bien y que sin saber cómo acaba siendo una mierda. Quería hablar contigo porque (aunque hace casi un año que terminó lo que quisiera que fuera "lo nuestro" y no nos veamos) aún eres mi hombro en el que llorar, esa almohada calentita que te pega un achuchón y no te pide explicaciones. Porque tienes esos ojos que me miraban como si sólo fueramos tú y yo y me hacían sentir tan calmada. Porque tus manos secaban mis lágrimas aun cuando eran injustas contigo. Porque lo diste todo, me lo diste todo, y nadie lo había hecho antes. Porque, a ratos, te echo mucho de menos.

Pero sé que no puedo llamar a tu puerta sólo cuando se me antoje, aunque me plante en tu rellano, así que me voy como he venido y guardo para mis adentros la mierda de día en que se ha convertido hoy.

4 comentarios:

Pareidolia dijo...

A veces el miedo a ser rechazado en esos momentos es muy fuerte, el temor a que el otro piense " ¿qué quieres? ¿qué buscas?" No sé si estás aún lamiéndote las heridas o ya han cicatrizado, si aún no le has dejado marchar del todo o si el tipo de relación ha cambiado y puedes ser capaz de mantener una amistad...Sea cual sea la respuesta yo me aplico la máxima de q es mejor arrepentirse de algo q se ha hecho y no de lo que no se hizo. Mañana, mañana no va a haber mierda en tu día, tía fuerte!
Un besico

Bear dijo...

La mierda se ha quedado en ese día de mierda!

Miguel dijo...

El tiempo pasará, las cicatrices cubrirán el corazon con costra dolorosa hasta cerrarlo...
Pero años despues sigue doliendo y el sinsentido solo me cabrea.

Cristina Poulain dijo...

xD lo de los comentarios fue sin querer.

Lo imposible solo tarda un poco más, pero también hay que saber mirar bien. No vale mirar solo a un punto, también tenemos derecho a vivir mientras llega ¿no? Y con esto no quiero decir que él sea lo imposible, porque mientras esperas lo imposible, puede ser que te equivocaras de persona.

UN beso