martes, 7 de junio de 2011

Puede ser que mañana esconda mi voz

Tres meses que pueden ser más que un infierno.

Tristemente estoy pensando en la cuenta atrás con ilusión, con ganas de dejar esta casa que cada día acaba convirtiéndose en una punzada porque ya no aguanto más.

Ha llegado un momento en que el drama es diario, en que ya no soporto ni un ápice de ti.

Cada cucharada de tiempo sabe amarga, como si estuviera ingiriendo un veneno poderoso en porciones tan pequeñas que no te das cuenta hasta que ha acabado contigo. Creo que soy mi propio veneno.

Quiero ser fría, pero mi lado débil puede conmigo y se me escapa una lágrima mientras intento explicarte que dejó de ser fácil, que no puedo pedirte que cambies, pero no puedo vivir así.

No puedo mirarte a la cara como si no pasara nada, como si no hubiera escuchado esas risas que no compartiste conmigo, como si los celos no me invadieran.

A veces el tiempo pasa tan despacio...

No hay comentarios: